martes, 15 de julio de 2008

Piensa,por un dia

Piensa, por un día

Los celos parasitan esas copas de cerveza negra
que asesinan sus precarios principios en lenta agonía
y que, por razones que se quiebran,
saltan el borde del acantilado de la vida.
Excitación que se incrementa con las escenas más violentas
de esos telefilms basura, que se acumulan en su subconsciente,
en supuestos y dulces algodones de superioridad.
Infundadas razones y recelos que se retroalimentan
... hasta que la bomba estalla... mientras ella calla.
Podría ser ella la protagonista de las telenovelas del mediodía
o la autora de innumerables sueños endulzados por la fantasía.
También podría ser ella quien fumigara esos insectos que se arrastran
en el cerebro distorsionado de su media naranja.
Pero ella es tan sólo un simple escondrijo donde vaciar su sed masculina
y donde tirar los desperdicios del día a día.
Así, ella pasa las mañanas preparando guisos en silencio,
mientras va metiendo en la lavadora sus frustrados anhelos de juventud.
Así, ella pasa las tardes rodeada de sueños inaccesibles,
mojando sus galletas en el café, descafeinado como su monotonía.
Podría ser ella la protagonista de una bella historia
del programa de sucesos que emiten
cuando se acaba su telenovela preferida.

Al anochecer ella espera con miedo su llegada.

La historia se repite cada noche,
cuando el cansancio del trabajo y la embriaguez
se combinan en un cóctel que advierte, con garras afiladas,
una necesidad imperiosa de cierta dosis violenta y diaria.
Al día siguiente ella, como si nada hubiera pasado,
enciende otra vez esa caja tonta convertida hace tiempo en su aliada.
La protagonista prosigue con sus aventuras cotidianas
pero con una nueva hinchazón violácea que adorna su cara.
El programa de sucesos tan sólo emite
cuchilladas de arma blanca que aspiran a ser
demostraciones de un amor ilimitado.
Podría ser ella también –piensa, por un día-
la protagonista de estas historias que llevan una muerte anunciada.

Ya es casi la hora de su llegada. Él se despide de sus amigos hasta mañana.
Ella esfuma las sombras y los miedos con sus maletas cargadas.
Mientras él se marcha del bar con su aliento enmohecido
... ella está abriendo las puertas de la comisaría.
Gemma.

No hay comentarios: